13 marzo, 2010

Enredos en el palco de la Maestranza

He querido meditar bien lo que escribo después del anuncio de la delegada del Gobierno de la Junta sobre los presidentes del palco de la Real Maestranza. En textos anteriores ya había expresado mi opinión sobre el adiós de Juan Murillo. Tal vez sea preciso rectificar algunos puntos. Después de consultar distintas fuentes, es evidente que Juan Murillo se marchó por su propia voluntad. Le habían cambiado parte del equipo poco antes de la Feria de 2009. Sin embargo, es un tema que algún día se podrá contar con todos los detalles.
Carmen Tovar, a la que los asuntos taurinos le importan un pimiento, ha tirado por la calle de en medio y ha nombrado cuatro equipos para este año 2010. De entrada, sobra un equipo. Si ya es difícil lograr la coordinación con tres presidentes, con cuatro todo será un galimatías. Nombra cuatro equipos porque no ha sido capaz de dar un golpe de efecto en lo alto de la mesa. En su día comentó en círculos privados que el suplente Julián Salguero no subiría como titular. Ahí está, con su escaso bagaje a cuestas, a cargo de la presidencia en la Real Maestranza. Y Fernández Rey, sigue y sigue.

La gran noticia es la vuelta de Paco Teja. En un artículo que publiqué en Sevillatoro tras la marcha de Murillo hace 9 meses, dije que se podía producir una vuelta gloriosa al palco. Me refería a Paco Teja. Los hechos se han confirmado. Vaya por delante que para los aficionados es una buena noticia que Teja sea nuevamente presidente. Nunca debió ser destituido por Demetrio Pérez, el delegado anterior a Carmen Tovar. Por tanto, es una buena noticia. Sólo hay que pedirle que siga siendo Paco Teja, que no aparezca ahora en la presidencia sevillana un hombre distinto, blando y con la manga más ancha. Si vuelve Teja el presidente de siempre, adelante. Si vuelve otro presidente, mal asunto.
Fue destituido porque estaba considerado conflictivo. Mala cosa sería que para no crear problemas ahora cambiara los principios que siempre le adornaron. Malo sería que su filosofía fuera la de no crear problemas, que es lo que su jefa Carmen Tovar quiere. Y no me ha gustado que lo primero que ha dicho sea que no quiere ser polémico. Porque esa frase encierra una intención premeditada de hacer la vista gorda cuando aparezcan los problemas.

En aras de evitar los posibles escándalos de orden público, se cometen tropelías en la presidencia. Lo ha dicho Fernández Rey, que en unas desafortunadas declaraciones comenta que estuvo a punto de suspender la corrida de Victorino del pasado año por la mala presentación del ganado y que si no lo hizo fue para evitar un escándalo. Es decir, prefirió ser cómplice de un engaño y un atraco a la afición antes que exigir toros de categoría para Sevilla. Este señor, que sólo por lo que ha dicho debería ser inmediatamente destituido, sigue ahí un año tras otro sin problemas, porque es el típico presidente que se inhibe ante situaciones complicadas, porque no quiere crear conflictos, aunque a cambio sea capaz de conceder orejas de valor ínfimo o permitir la lidia de toros de trapío ridículo para la Maestranza.

El asunto es mucho más complejo. Vuelve Teja, sigue Fernández Rey, irrumpe Salguero y, por lo menos, nos queda la esperanza de Anabel Moreno, de la que espero que persista en su talante del año pasado. Pero esa lista de equipos encierra más cosas. Por ejemplo, el delegado que creó el follón de la suspensión en 2008 con los policías amedrentando a los toreros en la corrida suspendida, esa corrida que le costó el cargo a Antonio Pulido, vuelve a la plaza y lo hace con Fernández Rey. En el tema de asesores, me alegro por el buen amigo Martín Cartaya, pero ¿por qué se ignora a Curro Puya? ¿No hay toreros retirados en Sevilla y su provincia para que sean asesores? Son las cosas de Carmen Tovar, que en un alarde de oscurantismo convocó a la prensa por la mañana para evitar aglomeraciones y preguntas. Y dijo que Murillo tiene las puertas abiertas. Me extrañaría mucho que Murillo volviera al palco, porque aunque no es del todo verdad aquello que escribí de que se marchó cinco minutos antes de que lo echaran, la realidad es que le pusieron un puente de plata para que dimitiera. Y después de eso, una vuelta sin aclaraciones no es lo más correcto. En realidad, las vueltas después de que te hayan echado no son una buena tarjeta de presentación para nadie. Sólo espero que Teja, que vuelve tras su expulsión, por lo menos siga siendo el de siempre, porque de lo contrario el asunto seria verdaderamente lamentable.
La mejor información taurina en http://www.sevillatoro.com/

1 comentario:

  1. Amigo Carlos la explicacion de que haya 4 equipos en la Maestranza es bastante facil,los politicos no quieren homogeneidad de criterios sino todo lo contrario por aquello de la diversidad, con el fin de evitar los reinos de Taifas.
    Prefieren que aquello sea la ONU porque asi no habra Union entre los equipos ante situaciones comprometidas y sera el politico siempre el que decida en ultima instancia. Esa es la tactica que estan empleando en todas las Plazas.

    ResponderEliminar

Cuando esto se acabe

La frase más repetida, la que sale de lo más profundo de nuestros corazones es, “cuando esto se acabe”. ¿Cómo será ese día de la vu...